Aboi, Gafoi, Tañoi y otros topónimos gallegos acabados en -oi

Si repasamos la relación de entidades de población que forman el ayuntamiento coruñés de Frades, nos encontramos con cuatro topónimos que comparten una característica curiosa: su terminación en -oi. Es el caso de Aboi y Alto de Aboi, los dos en la parroquia de Céltigos; Gafoi, nombre de una de sus 12 feligresías; y Tañoi, en la parroquia de Abellá. Más allá de su musicalidad, estos cuatro nombres de lugar esconden un origen común que nos habla también de la forma en que nuestros antepasados organizaron el territorio.

Los principales estudios en toponimia gallega coinciden en señalar que estos topónimos con terminación en -oi del ayuntamiento de Frades, junto a otros más de cien repartidos por el territorio gallego (Beloi, Caroi, Fingoi, Godoi, Meroi, Saboi y un largo etcétera), proceden de antiguos nombres de persona, poseedores o fundadores de explotaciones agrícolas y ganaderas en la época tardoantigua o altomedieval, las antiguas “villae”. El sufijo correspondería así a la evolución de la terminación latina -ONI o -ONE propia del genitivo que se utilizaba para expresar pertenencia, relación o propiedad.

Estos topónimos se formaban a través de un sintagma de dos elementos: el segundo era lo que acabamos de ver, el nombre de persona en genitivo para indicar quien era el propietario. En lo que respeta al primero, indicaba el objeto poseído por esa persona, por lo general una VILLA, que en la época medieval tenía el significado de ‘explotación ganadera o agrícola situada fuera de las ciudades con las edificaciones precisas’.

Así, Aboi fue en origen una (VILLA) AVIOLI, este último genitivo del nombre medieval AVIOLUS o AVOLUS, un diminutivo del latín AVUS ‘abuelo’. El primer elemento del sintagma, VILLA, acabó desapareciendo con el paso del tiempo en la mayor parte de estos topónimos, pero se conserva en alguno de ellos: un ejemplo es la localidad de Vilaboi (ayuntamiento de Valdoviño), que comparte origen con el Aboi de Frades.

Aboi es un topónimo bien estudiado y que está presente también en los ayuntamientos de Tordoia, Muxía y Caldas de Reis. No acontece el mismo con los otros dos topónimos de Frades que motivan este artículo, Gafoi y Tañoi, los dos son únicos en Galicia. En lo que respeta al primero, Gafoi, es un topónimo de difícil interpretación, aunque Kremer lo relacionó con la voz antigua gafo ‘leproso’. Por su parte, Piel y Kremer incluyeron Tañoi entre los derivados del antropónimo TAN(N)O, aunque tal vez proceda del antropónimo latino TANIUS.

Aboi, Gafoi , Tañoi y otros topónimos gallegos acabados en -oi son, por tanto, testimonios vivos que nos permiten reconstruir la historia de los asentamientos humanos en Frades y por toda Galicia.

Bibliografía

  • Piel, Joseph M. /Dieter Kremer (1976): Hispano-gotisches Namenbuch. Heidelberg: Carl Winter.
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