Si vas a Penarrubia y preguntas por Eduardo Álvarez es posible que nadie sepa indicarte dónde vive. Ahora bien, la respuesta cambia si preguntas por Eduardo do Costureiro. En muchas partes de nuestro país, pero especialmente en la provincia de Lugo, las casas tienen nombre de por sí, que se mantiene incluso cuando cambian de propietario. Esos nombres de casas contienen el apellido, apodo o profesión del primero propietario o su lugar de origen y acaban identificando las personas que moraron en esas viviendas de generación en generación, así como a toda su familia.
En este nuevo capítulo de “Os nomes da nosa terra” conocemos los oikónimos o nombres de las casas que representan una vinculación emocional con las familias y con el lugar de donde estas provienen, pues constituyen una expresión de su identidad personal.
Entre los siglos XVI y XVIII, los paladares más exquisitos de la Corte Real anhelaban una receta de ostras en escabeche. Esta...
Encontrar el significado original de un topónimo es, a veces, una tarea muy complicada, especialmente en aquellos casos como el que hoy...