La toponimia vuelve a estar presente en la iniciativa “Modo galego. Actívao!”
Alrededor de 2.500 niños y niñas de infantil, primaria y secundaria (solo 1º y 2º de la ESO) de 10 centros educativos del ayuntamiento de Ames vuelven a plantearse el reto de activar su “modo galego” en este año 2025. A lo largo de un mes, entre enero y febrero, los chicos de Ames se suma al proyecto de inmersión lingüística creado por la Real Academia Galega y el Ayuntamiento de Ames bajo el nombre de “Modo galego, actívao!”, una colaboración muy fructífera que ambas instituciones mantienen desde hace ya tres años y que busca dinamizar el gallego en uno de los ámbitos más necesitados hoy en día: la infancia y la juventud.
Los diferentes centros que participan en la iniciativa promueven en el mes del "modo galego" toda una serie de retos y reflexiones para normalizar el uso del idioma no solo en el día a día en las escuelas, sino también en el ámbito extraescolar, familiar y en las actividades de ocio. Como ya ocurrió en ediciones anteriores, la toponimia y la plataforma Galicia Nomeada vuelven a tener protagonismo, esta vez con un reto muy especial: “Intentamos conseguir o superpoder da omnipresencia”.
A través de este reto se pretende transmitir la importancia que tiene la toponimia en nuestra vida y en nuestra cultura. Como bien les indica Vicente Feijoo Ares, coordinador técnico de Galicia Nomeada, en el vídeo introductorio de la acción diaria del programa, “la toponimia gallega nos hace a los gallegos únicos en toda Europa por su variedad, cantidad y antigüedad”. Es necesario que el alumnado comprenda el valor de los topónimos como patrimonio cultural y la importante información que nos aportan sobre el idioma y la historia de nuestro país.
La acción propuesta por el equipo técnico del “Modo galego, actívao!” para trabajar la toponimia de una forma sencilla y amena consistía en que el alumnado obsequiase a sus compañeros con un regalo muy especial y único, un topónimo: un nombre de lugar que les guste mucho o que les traiga hermosos recuerdos, como por ejemplo el nombre de la aldea donde pasan los veranos con los abuelos y abuelas. Para quien no se le ocurra ningún nombre, puede buscarlo en el visor de topónimos de Galicia Nomeada o en el libro Toponimia de Ames (disponible en esta misma página). Con el topónimo escogido, deben realizar una figura de papiroflexia, escribir en ella el nombre e introducirla en una caja. Tras mezclar todas las creaciones, cada chico o chica, o incluso sus profesores y profesoras, sacarán su propio obsequio.
Desde Galicia Nomeada, esperamos que todo el alumnado de los centros educativos de Ames aproveche esta iniciativa para conocer de forma lúdica la riqueza toponímica de Galicia. También queremos agradecer a los compañeros del Seminario de Sociolingüística de la Real Academia Galega su invitación para que participemos en esta interesante y productiva iniciativa. ¡Larga vida al “Modo galego, actívao!”!